Una "chiball" es una técnica en Reiki que implica la creación de una esfera de energía curativa para enviar energía positiva a una persona, situación o lugar. Aquí te doy una guía básica para hacer una chiball en Reiki:

1. Preparación: Encuentra un lugar tranquilo y cómodo donde puedas realizar tu práctica de Reiki sin distracciones. Si lo deseas, enciende algunas velas o incienso para crear un ambiente relajado.

2. Centrarse y conectar: Siéntate en una posición cómoda con las palmas de las manos hacia arriba. Cierra los ojos y toma varias respiraciones profundas para centrarte y relajarte. Luego, visualiza cómo una luz blanca brillante desciende desde el universo y entra por la parte superior de tu cabeza, llenándote de energía positiva.

3. Intención: Establece tu intención para la chiball. ¿Para qué o quién estás creando esta esfera de energía? Puede ser para sanar a alguien, para enviar energía de amor y paz a una situación o incluso para cargar un objeto con energía positiva.

4. Manos sobre la esfera: Imagina una esfera de energía entre tus manos. Puedes visualizarla como una bola de luz brillante o como un campo de energía vibrante. Siente la energía fluyendo desde tu corazón y tus manos hacia esta esfera.

5. Carga con energía Reiki: Ahora, comienza a enviar energía Reiki a la esfera. Puedes hacerlo simplemente manteniendo la intención de enviar energía curativa a la chiball. Si has recibido iniciaciones en Reiki, puedes usar los símbolos de Reiki para potenciar la energía que estás enviando.

6. Visualización y sentimiento: Mientras sostienes la esfera entre tus manos, visualiza cómo se llena de luz curativa y amorosa. Siente la energía pulsando y vibrando entre tus manos.

7. Envío: Una vez que sientas que la chiball está cargada con la energía adecuada, puedes enviarla a su destino. Puedes hacerlo simplemente imaginando que la esfera de energía flota hacia la persona, situación o lugar que has elegido.

8. Agradecimiento: Después de enviar la chiball, agradece a la energía Reiki y al universo por su ayuda en el proceso de sanación.

Recuerda que la práctica regular y la intención amorosa son fundamentales en el Reiki. ¡Que tengas una experiencia enriquecedora con tu chiball!

Sanar tu niño interior es un concepto que se ha vuelto importante en la psicología y el desarrollo personal. Se refiere a la idea de trabajar en las heridas emocionales y traumas que experimentaste durante tu infancia para lograr un mayor bienestar emocional y mental en la vida adulta. 

Aquí hay algunas razones por las que sanar tu niño interior es importante:

1. Mejora la salud mental y emocional: Sanar tu niño interior puede ayudarte a abordar problemas de salud mental como la ansiedad, la depresión, el estrés postraumático y otros trastornos relacionados con traumas pasados. Al confrontar y procesar estos traumas, puedes experimentar una mayor paz mental y estabilidad emocional.

2. Mejora la autoestima: Muchas de nuestras creencias y percepciones sobre nosotros mismos se forman en la infancia. Sanar tu niño interior te permite reevaluar y cambiar creencias limitantes o negativas sobre tu valía y autoestima, lo que puede conducir a una mayor confianza en ti mismo.

3. Mejora las relaciones interpersonales: Los patrones de comportamiento y las dinámicas de relación que aprendemos en la infancia pueden persistir en la vida adulta. Al sanar tu niño interior, puedes identificar y modificar patrones dañinos de interacción y desarrollar relaciones más saludables y satisfactorias.

4. Aumenta la autorreflexión: El proceso de sanar tu niño interior implica mirar hacia atrás en tu pasado y comprender cómo las experiencias de la infancia te han afectado. Esta autorreflexión puede ayudarte a conocerte mejor y tomar decisiones más conscientes en tu vida adulta.

5. Fomenta la resiliencia: Sanar tu niño interior implica enfrentar y superar traumas y dificultades pasadas. Esto fortalece tu capacidad de enfrentar desafíos y superar obstáculos en la vida actual, lo que aumenta tu resiliencia emocional.

6. Promueve la autenticidad: Al sanar tu niño interior, puedes liberarte de las máscaras y defensas que has desarrollado para protegerte en la infancia. Esto te permite ser más auténtico y genuino en tus relaciones y en la forma en que te relacionas contigo mismo.

7. Facilita el crecimiento personal: La sanación del niño interior es un proceso continuo de crecimiento y desarrollo personal. Te ayuda a crecer emocionalmente, a desarrollar una mayor comprensión de ti mismo y a alcanzar tu potencial en la vida.

En resumen, sanar tu niño interior es importante porque te permite abordar las heridas emocionales de la infancia que pueden estar afectando tu vida en la edad adulta. Este proceso puede conducir a una mayor salud mental, autoestima, relaciones más saludables y un mayor bienestar en general.